La creación o no de cinturones que distingan a los mejores luchadores de cada categoría es un tema de debate bastante habitual en WOW, y si bien la compañía no ha dado signos de que vaya a cambiar su postura en un futuro cercano, su arranque de temporada en Bilbao ha dejado una cosa clara, cuando se habla del peso mosca, su campeón sin corona es Davi Santos.
La realidad es la que es y todos, incluidos el medio que publica este artículo, somos cómplices en esa línea narrativa: el evento principal era entre Ander y Santos, pero la gran estrella a ojos del público era el español.
El brasileño, de alguna manera, parecía un figurante a ojos de muchos, pero llegaba a la velada tras haberse impuesto a dos de los mejores pesos mosca de WOW, Rafael Calderón y Ayoub Nacer, y una vez más, demostró que estaba dispuesto a aguar la fiesta preparada para los locales.
Durante 3 asaltos, Santos se batió de tú a tú con Sánchez, planteándole un gran problema con el alcance de sus extremidades y con unos jabs tan poco ortodoxos como cargados de malas intenciones. Empezó de menos a más, pero cuando sonó la campana de los 15 minutos era el claro vencedor del envite.
Davi Santos, que llegó a WOW como un desconocido y con un 3-2 en su haber, sumaba así su tercera victoria en un año natural y extendía su récord hasta el 6-2. Este último triunfo, además, como parte del combate principal de la noche.
Un éxito que ha logrado sin hacer ruido y con mucha humildad en su trabajo, y que hay que reconocerle y agradecerle en el futuro, porque aun viniendo del otro lado del charco, Santos es una estrella de WOW que deberíamos disfrutar como propia.